Firma Invitada: Sergio Pulido
«Sonreír es definitivamente uno de los mejores y más bellos remedios» (Paulo Coelho)
Una bonita sonrisa puede ser nuestro mayor atractivo o nuestra peor carta de presentación. Afortunadamente la salud bucodental, en los últimos años, se ha convertido en algo imprescindible desde la primera dentición. Al margen de cualquier otro tratamiento como la ortodoncia, implantes y carillas, el blanqueamiento dental es uno de los servicios más demandados.
Pero dejemos que sea el Dr. Sergio Pulido de la Clinica Pulidental de Jaén, el que nos informe de esta técnica.
El paso del tiempo es una de las causas principales del oscurecimiento de nuestros dientes. Fumar, y la ingesta de determinados alimentos y bebidas contribuyen también a la pérdida del color natural. Por eso una vez realizado el tratamiento debemos mantener unas medidas extremas de higiene dental, principalmente después de cada comida, para mantener el blanco deseado el máximo tiempo posible.
En primer lugar, debemos tener en cuenta que no es solo un tratamiento estético, sino odontológico, por eso es necesario acudir a un profesional para garantizar un resultado excelente y sobre todo seguro. No debemos olvidar una serie de factores a la hora de iniciar el blanqueamiento, el primero y fundamental es no padecer ninguna enfermedad periodontal, caries, gingivitis, etc. Una revisión previa puede descartar cualquier problema y solucionarlo antes del tratamiento.
No es un procedimiento doloroso, en casos de sensibilidad dental extrema puede notar alguna molestia que será puntual y momentánea. Normalmente en estos casos se pautará el uso de dentífricos y colutorios específicos para sensibilidad dental.
Es importante saber que no en todos los casos el blanqueamiento es la solución, en el caso de manchas por tetraciclinas, el especialista deberá optar por el tratamiento con carillas estéticas para obtener un blanco más natural. En dientes que hayan sufrido endodoncias, al no tener irrigación, debería hacerse un blanqueamiento interno de la pieza.
EN CASA
Existen diferentes marcas comerciales que posibilitan el blanqueamiento dental en casa, aunque el resultado en la mayoría de las ocasiones, no es el esperado. El kit consiste en un gel blanqueante y unas férulas que se colocan en los dientes durante un tiempo determinado y varios días consecutivos, dependiendo del tono a conseguir. Normalmente cuando dejas de utilizarlo y después de un tiempo, el diente recupera su color original antes del tratamiento.
CLÍNICA
Es la única opción que nos ofrece un blanqueamiento duradero de forma fácil e indolora. Las encías se protegen con una funda especial, se aplica gel blanqueante en los dientes y luego se utiliza una luz fría (led o ultravioleta) que potencia las propiedades del gel. Para evitar dañar los ojos, se utilizan unas gafas especiales. Es un tratamiento eficaz, sus resultados son inmediatos, se realiza en una sola sesión y todo el proceso está supervisado por un odontólogo.
MIXTO
En este caso se combina el blanqueamiento que se realiza en la clínica con el que realizamos en casa. Será el especialista el que nos facilite la férula y el gel para el mantenimiento.
Este procedimiento que es intensivo, está indicado en casos donde el color del diente está muy deteriorado y con la sesión clínica no tiene suficiente. Si seguimos las pautas del especialista, el éxito está asegurado.
Y recuerda: como siempre hay que seguir las pautas habituales de higiene bucodental con dentífricos específicos, para que el blanqueamiento sea duradero.
DIETA BLANCA
Una vez finalizado el tratamiento, se recomienda durante al menos las siguientes 72 horas, seguir una «dieta blanca”. Es una dieta que se prescribe durante y después del tratamiento de blanqueamiento dental y que se caracteriza porque los alimentos que están permitidos son de color blanco. Al blanquear los dientes el esmalte queda poroso y su estructura química varía, por eso debemos evitar alimentos cuyo ph pueda alterarlo e impidan que el blanqueamiento se fije.
