Firma Inviada: Inmaculada Illescas
Empezar. Ese quizá es el principio de un buen comienzo.
Principios hay muchos, pero buenos comienzos, muy pocos. Y es que lo más importante para que algo que llegue al final valga la pena, es querer empezar de verdad. Luego, como todo lo que sucede en la vida puede o no terminar de la forma esperada, pero si has querido hacerlo, siempre habrá merecido la pena con independencia del final. Por eso me encantan los comienzos, porque estrenas una ilusión recién abierta, llena de nervios, incertidumbres, sentimientos nuevos, e incluso miedos que te ponen en alerta para avisarte de cosas que no debes pasar por alto.
Es más frecuente que cada vez hagamos más las cosas por inercia, sin el disfrute y el cuidado que se merecen, algo que hace más fuerte a la desidia y que inevitablemente consigue que se vayan apagando poco a poco dejando que aparezca la desgana ¿acaso a alguien que le guste comer se alimentaría de aire? Supongo que no, pero básicamente porque el aire no contiene los aportes necesarios que el cuerpo necesita para tener la energía suficiente y llegaría un momento en el que o te alimentas, o dejarías de existir, pues algo parecido pasa con cada una de las cosas que hacemos, amar, trabajar, cuidar, en definitiva tratar de conseguir que todo lo que hayamos empezado lo terminemos al final del día, del año o de tu vida, con una sonrisa, de lucha, de esfuerzo, de alegría o de pena… pero con una bonita sonrisa que haga recordar el motivo por el que empezaste de nuevo.
Así que, propuesta de Fin y Comienzo de Año nuevo, terminarlo con una bonita sonrisa; por todo lo que nos ha sucedido, y por lo que no, por todo lo que hemos aprendido, y por lo que nos queda por aprender, por las nuevas oportunidades y comienzos, en definitiva, por querer empezar un Año Nuevo cargado de razones para querer empezarlo (365).
Gracias por esta oportunidad ConGlamour y enhorabuena por la nueva web.
Feliz Navidad!