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“La moda se pasa de moda, el estilo jamás” (Coco Channel)
Aunque hemos repetido en multitud de ocasiones que vivimos en una sociedad donde la imagen y la primera impresión describen nuestra personalidad, no está de más recordar la importancia de encontrar un estilo propio que nos defina y que será nuestra carta de presentación ante la sociedad.
Siempre es momento oportuno para renovarnos, tanto exterior como interiormente. Muchas veces la renovación exterior es la demostración y puesta en práctica de una evolución personal. Buscar y encontrar un estilo único y personal con el que nos sentiremos verdaderamente a gusto e identificados es entrar en un proceso creativo constante que nos ayudará a aceptar el paso del tiempo y a disfrutar con los cambios. Tal y como decía Madonna: “Vivir es reinventarse todos los días” y solo de nosotros depende que esa reinvención nos lleve al equilibrio personal.
Podríamos definir el estilo como la capacidad de combinar diferentes prendas de ropa y complementos, líneas, diseños y colores, de forma que reflejen nuestra personalidad, nuestra forma de ser y actuar. Hay personas que marcan y crean un estilo propio y son seguidas por otras que lo adaptan a su figura. Lo ideal no es copiar, sino tomar como referencia y a partir de ahí crear el nuestro.
A la hora de catalogar nuestro estilo, muchas veces no sabemos definirlo: moderno, hippy, neohippy, hippy chic, bohemio, retro, sexy, boho, clásico, romántico, sporty, preppy, grunge, minimalista, hipster.… pero, ¿existen todos esos estilos?
Técnicamente esos no son estilos, son tendencias dentro de un estilo. En realidad, sólo podemos encontrar tres “estilos”:
Clásico: Combinamos prendas básicas, de líneas rectas o semientalladas, en colores neutros y complementos contrastados. Son prendas que no pasan de moda y las que componen básicamente el fondo de armario.
Clásico actualizado: Tomando como base el estilo clásico, incorporamos tendencias nuevas en los complementos, o en una sola prenda: Por ejemplo: Un vestido clásico se actualiza con unos zapatos de print animal.
Vanguardista: Es el estilo de las fashion victim, las que incorporan las tendencias en todo el conjunto. Los blogs de moda y las llamadas it girls son las que en la actualidad marcan el éxito o fracaso de una tendencia.
En nombre de la moda, se cometen muchos errores. El primero y principal no ser conscientes de nuestra realidad (edad, talla, profesión) e intentar adaptar las últimas tendencias sin pensar si nos favorecen o no. Aunque tengamos buen cuerpo, no debemos olvidar que tenemos la edad que tenemos y que no hay nada más ridículo que una chica joven vestida como una señora mayor, pero igualmente es absurdo que una señora de sesenta años se vista como una quinceañera.
A modo de pequeñas recomendaciones
- Las rayas verticales estilizan, las horizontales engordan.
- Los grandes estampados también aumentan una talla, mejor decantarse por estampados pequeños.
- El color negro es el básico por excelencia y estiliza, igual que cualquier otro color liso oscuro (total look).
- No mezclar distintos tejidos (un jersey de lana y pantalón de lino).
- Las joyas hay que elegirlas con armonía, si llevas un maxi collar, utiliza el resto de joyas de forma discreta: pendientes pequeños y sin pulseras excesivas.
- No mostrar demasiada piel y siempre usar nuestra talla: no elegir prendas grandes por comodidad y ropa ajustada “porque era la única talla que quedaba”
- Viste para ti y solo para ti. No te preocupes de como nos van a ver los demás, confia en tu intuición y apuesta por lo que te hace sentir más bella, cómoda y más tú.
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